Análisis Opinión

Presidente Danilo Medina, convoque el dialogo para las elecciones

Presidente Danilo Medina, convoque al dialogo para la discusión de la nueva fecha de las elecciones presidenciales y congresuales. Hoy está en sus manos como usted quiere que se escriba la historia de sus dos mandatos.

Nuestro país se encuentra luchando contra la pandemia del COVID-19. Las autoridades dictaron cuarentena y toque de queda; medidas oportunas que buscan mantener bajo nivel de contagio local e impedir que haya una propagación descontrolada del coronavirus. Al presidente se le otorgaron poderes especiales para esto.

Queda pendiente la aplicación de las pruebas masivas para tener un control más efectivo de los casos positivos. Ya se están aplicando tratamientos paliativos que contribuyen a disminuir los decesos mientras crean la vacuna.

De igual manera se han aplicado dos programas innovadores de asistencia social: Quédate En Casa y FASE. Ambos programas sentarán un antes y después, tomando en cuenta los aspectos técnicos, tecnológicos utilizados como políticas públicas de subsidio y asistencia social.

Sin embargo, nuestra economía proyecta un crecimiento cero para el 2020 según datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). La actividad económica estáparalizada. El turismo, las remesas y las exportaciones se han desplomado. Estados Unidos, Unión Europea, Canadá y China países con los cuales tenemos relaciones comerciales y son nuestros mercados turísticos proyectanrecesión en sus economías. Estamos viviendo una economía de guerra.

Es evidente que en las dos primeras décadas de este siglo nos habremos enfrentado como país a tres crisiseconómicas y la actual será superior a las anteriores. Esta es singular: Sin vacuna no hay economía. Las dos primeras incrementaron la deuda social acumulada. El impacto de esta se verá en el futuro próximo.

El país, no obstante, venía arrastrando una crisis política que se acentuó con la suspensión de las elecciones en febrero pasado que puso la institucionalidad a prueba. La madurez de nuestros políticos quedó demostrada, y por el bien del país todos apostaron a la democracia.

Sin embargo, la semilla de la desconfianza anda esparcida,abonada con el trauma de esta pandemia. La desconfianza y el COVID-19 tienen de similitud que su forma de contagio es imperceptible al ojo humano, pero con manifestaciones materiales evidentes.

El 24 de abril deben tomar posesión las electas autoridades municipales. Para el 17 de mayo serían las elecciones presidenciales y congresuales. Pero siendo realistas, esto no será posible. La salud y la vida de los dominicanos está por encima de todo. Sin ciudadanos saludables no hay ni democracia, ni economía.

Ante este panorama lúgubre solo hay un personaje con las facultades terrenales, legales para que con su justa actuación pueda crear las condiciones para que el futuro cercano del país no se vea afectado por una crisis política, democrática. Es al presidente Danilo Medina a quien el pueblo dominicano le entregó en dos ocasiones el destino de la nación.

El estadista Danilo Medina ha sido convocado por la historia. Los estragos del coronavirus quedarán registrados en la posteridad. Pero la actuación hoy es determinante para el desenlace del futuro. El sostenimiento de la vida institucional solo es y será posible con el dialogo franco de las elites políticas, económicas, religiosas y sociales.

La posposición de las elecciones es inminente; pero esta es una salida política ante la grave situación. Se necesitan testigos y garantes para que los pactos que surjan de este diálogo se puedan cumplir. Repito. – el diálogo es político. La oposición política dijo estar abierta a abordar el tema, ahora le toca el presidente Medina tender el puente.

Todos estamos llorando los enfermos y los muertos que nos va dejando el coronavirus, pero la vida institucional no se debe detener. Todavía nos quedan diez millones de dominicanos y generaciones venideras por salvar.

En medio de la crisis se debe materializar el dialogo político. Debemos poner a prueba nuestra madurez como nación. Demostrar que hemos sido de las economías más pujantes de Latinoamérica gracias a la estabilidad política.

Solo si el diálogo se da oportuno, se podrán realizar elecciones con el hito histórico de una muy breve transición. Sin estabilidad política que envíe una señal clara a los agentes económicos, las nuevas autoridades electas no podrán enfrentar la responsabilidad de reactivar la actividad económica e iniciar la renegociación con los acreedores de nuestra deuda.

No es tiempo del falso silencio que recomiendan los asesores. El coronavirus no le dibuja un final feliz a ningún gobernante.


Autor: Jonathan Cabrera

Presidente del Consejo de Desarrollo Económico y Social de Santo Domingo

Mercadólogo consultor y asesor político 

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